Bioflavonoides + Vitamina C: sinergia antioxidante con potencial en cirugía y periodoncia (OSTEOIMPLANT COMPLEX )

En el campo de la salud oral, la reparación tisular, la regeneración ósea y el control de la inflamación son pilares fundamentales, especialmente cuando hablamos de cirugía implantológica o tratamientos periodontales. Los suplementos que combinan bioflavonoides con vitamina C (como la fórmula que mencionas, OsteoImplant Complex sin betacarotenos) podrían aportar efectos beneficiosos adicionales, gracias a sus acciones antioxidante, antiinflamatoria y moduladora del metabolismo del colágeno.

A continuación se desgranan los mecanismos posibles y la evidencia científica disponible.
 

¿Qué son los bioflavonoides (flavonoides)?

• Los flavonoides son compuestos fenólicos presentes en frutas, verduras, té, cacao, cítricos, etc.
• Actúan como antioxidantes, moduladores de rutas de señalización inflamatoria, reguladores del óxido nítrico, inductores de angiogénesis moderada, y promotores de la cicatrización.  
• En heridas, se ha observado que los flavonoides pueden acelerar la reepitelización, estimular la formación de tejido de granulación, mejorar la formación de vasos y modular el estrés oxidativo local.  
• Un ejemplo concreto: el flavonoide hesperidina (proveniente de cítricos) ha mostrado en modelo animal potenciar la regeneración de heridas profundas, modular la inflamación, preservar la síntesis de colágeno e inducir reparación más eficaz frente a daño por radiación.  
 
Por todas estas razones, los flavonoides se consideran candidatos prometedores para aplicaciones en cicatrización y reparación tisular.
 

Funciones clave de la vitamina C en reparación y periodoncia

• La vitamina C es esencial para la síntesis de colágeno (hidroxilación de prolina y lisina), lo que es crítico en la formación de matriz extracelular en la cicatrización.  
• También tiene actividad antioxidante, neutraliza especies reactivas de oxígeno (ROS), y protege células frente al estrés oxidativo en el entorno inflamatorio.  
• En aplicaciones odontológicas, se ha observado que la suplementación con vitamina C mejora los resultados postoperatorios tras implantes dentales, favoreciendo una mejor cicatrización en pacientes con periodontitis crónica.  
• Un metaanálisis / revisión señala que tomar 200 mg de vitamina C tres veces al día mejoró parámetros de cicatrización de alvéolos después de extracciones dentales.  
• En enfermedades periodontales, niveles bajos de vitamina C se han asociado con mayor sangrado gingival, mayor profundidad de bolsa y peor salud periodontal.  
 
Por tanto, la vitamina C es un pilar biológico claro para favorecer reparación, limitar daño oxidativo y sostener la formación de tejido conectivo después de intervenciones periodontales o implantológicas.
 

Sinergia entre bioflavonoides y vitamina C: potencial y evidencia

Combinar bioflavonoides y vitamina C puede ofrecer ventajas adicionales frente a cada compuesto por separado:
 
• Un estudio reciente demostró que la combinación de vitamina C con bioflavonoides produjo un efecto sinérgico en aspectos antioxidantes, antiinflamatorios y antitrombóticos frente a la vitamina C sola.  
• Los flavonoides pueden proteger la vitamina C de la oxidación en el cuerpo, prolongando su acción antioxidante local.  
• En heridas cutáneas, los flavonoides han mostrado actuar sobre rutas de señalización (NF-κB, Nrf2, MAPK, PI3K/Akt, TGF-β) que regulan la inflamación, proliferación celular, angiogénesis y remodelado tisular.  
• En modelos animales con daño por radiación, la hesperidina (bioflavonoide) en combinación con ácido ascórbico aceleró la reparación de heridas profundas, redujo el tiempo de cicatrización y preservó la síntesis de colágeno frente al daño inducido.  
• En la literatura cardiovascular y de salud sistemática, los flavonoides cítricos han mostrado efectos beneficiosos más potentemente cuando se acompañan de vitamina C.  
 
Este soporte molecular y experimental sugiere que una formulación que incluya ambos compuestos puede tener mayor eficacia en contextos donde la regeneración tisular es clave (como en cirugía ósea, implantes dentales o tratamiento periodontal avanzando).
 

Aplicaciones en cirugía oral e implantología

Cuando se realiza una cirugía oral (por ejemplo, inserción de implantes, injertos óseos, elevación de seno, regeneración tisular guiada), los retos principales incluyen:
 
1. Control del estrés oxidativo e inflamación local
2. Formación rápida de tejido conectivo y matriz extracelular funcional
3. Vascularización adecuada del injerto o zona tratada
4. Mantenimiento del balance entre síntesis y degradación del colágeno
 
En este escenario, una combinación de vitamina C con bioflavonoides podría:
 
• Atacar el exceso de especies reactivas (ROS) generadas tras el trauma quirúrgico
• Modulador la respuesta inflamatoria a niveles favorables
• Potenciar la síntesis de colágeno y estabilidad de la matriz
• Favorecer angiogénesis controlada
• Reducir riesgo de necrosis, fibrosis excesiva o reacción adversa al biomaterial
 
Un estudio clínico actualmente en marcha (registro NCT03938584) investiga los efectos de vitamina C frente a placebo en cicatrización tras fractura mandibular.  
 
Además, estudios previos en implantología apuntan que la suplementación con vitamina C mejora la cicatrización en pacientes con periodontitis, y podría reducir fallos en injertos blandos/duros cuando el aporte nutricional es adecuado.  
 
Aunque la evidencia directa con bioflavonoides en cirugía oral es más limitada (más común en modelos cutáneos o experimentales), los mecanismos biológicos y los resultados preclínicos son prometedores para extender su aplicación.
 
Conclusión
 
La fórmula Osteoimplant Complex que incluya bioflavonoides + vitamina C tiene una base biológica sólida para aportar apoyo adicional en cirugía oral, periodoncia y regeneración tisular. Los bioflavonoides pueden actuar modulando la inflamación, reduciendo el estrés oxidativo y facilitando rutas de cicatrización, mientras que la vitamina C es esencial para la síntesis de colágeno y reparación tisular.
 
Aunque la evidencia clínica directa en odontología aún es incipiente, los estudios experimentales y moleculares respaldan su uso como coadyuvante razonable en protocolos de rehabilitación oral.

Compartir :

Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp